A pesar de que la película de este director que vi el trimestre pasado no me entusiasmó mucho, he decidido darle una seguanda oportunidad, y la verdad es que ha cambiado mi opinión sobre este famoso director, porque auqneu sean parecidas esta me ha gustado mucho más.
Desde su caracter infantil nos abre los ojos a ese mundo infantil de los sueños y la imaginación que de alguna forma todos hemos vivido, esas preocupaciones desde una perspectva tan singular como la de los ojos de un niño que aún mira el mundo como algo desconocido, que debe descubrir a cada paso que da, lo que le lleva a la creacción de un amigo imaginario como es "Totoro" que no habla y que la película define como el viento que recorre las noches.
Me sorprende la naturaleza de los personajes , a veces parece traspasan la barrera de la animación, Miyazaki se esfuerza por mostrarnos hasta el más mínimo detalle del comportamiento de los personajes.
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