Apenas conocía a este fotografo antes de ver el maravilloso documental de clase...
James Nachtwey, es un fotografo extraordinario, y muy particular, suele hacer su trabajo en solitario, sin prisas.
Trabaja con película de carrete, normalmente en Blanco y negro, restando de esta forma importancia al color, no tiene ayudantes, el mismo mide la escena y la fotografía.
Se acera a las personas lentamente, ellos le aceptan porque saben que su trabajo, de alguna manera, es como una voz que cuenta al mundo lo que ocurre en otros lugares, las injusticias, las historias... En situaciones normales no podría hacer este tipo de fotos, no podría presentarse en un intierro a fotografíar el llanto de una madre... pero en este tipo de experiencias de guerra, o en los desastres naturales, las personas comprenden que eso es bueno para que la gente vea la realidad y se conciencie de lo que pasa en otros lugares del planeta. Se siente parte del asunto. Además James Nachtwey, intenta no estorvar en la escena, les habla bajo, se mueve lento... intenta no molestar, y es esta forma tan especial de trabajo la que creo que hace que sque esas fotografías tan buenas pero teniendo los pies en la tierra.
Es optimista, le ayuda pensar que lo que hace sirve de algo, que no siempre habrá guerras, ni pobreza extrema, ni niños que mueran de hambre...
Solo de esta forma reune fuerzas y valor suficientes para hacer este arriesgado trabajo.
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